Fundación Paula Carrillo Valdivia – Cuentos y Narraciones
La cosecha se termino, el moreno joven no volvió. Para Casimira ya no tenia chiste ir al molino de nixtamal. Ya no caminaba como venadita asustada. Sabía que al voltear ya no veía los mogotes. Ni al endino prieto que la molestaba. Ni escucharía el tonito del silbido que le lanzaba cada vez que pasaba. La amargura le apachurraba el corazón.